Este modelo de estufa, diseñado especialmente con la retroalimentación de la comunidad local, está a nivel de piso para adaptarse a las costumbres locales. Además, incluye una mesa de trabajo, para que los usuarios puedan colocar sus utensilios y preparar alimentos sin tener contacto directo con el piso. El objetivo principal es contribuir a mejorar las condiciones de salud de las familias pobres, afectados por el humo generado por la combustión de la leña y fogón abierto, en especial personas mayores, mujeres y niños que permanecen más tiempo en la cocina. Este modelo reduce el consumo de leña en un 70% y elimina el humo del interior de las viviendas, lo que permite mejorar significativamente, no solo la salud, sino también la deforestación de esta región y el aspecto económico por el ahorro en la compra de este biocombustible.
La entrega de las estufas se realizó en febrero y se continuará evaluando durante 5 años. En la primera fase, los beneficiarios recibieron formación detallada para maximizar el beneficio de esta tecnología.
Esta iniciativa no solo mejora la calidad de vida de los habitantes de la Colonia Vista Hermosa, sino que también promueve el uso de tecnologías sostenibles y amigables con el medio ambiente. Gracias a la colaboración de instituciones mencionadas y el apoyo de la comunidad, el proyecto está destinado a ser un ejemplo de innovación y cooperación en la región.
Participan también en este proceso el Dr. Marco Antonio Zamora Antuñano de UVM, el Dr. Gabriel Castañeda Nolasco y la Dra. Daisy Escobar Castillejos de la UNACH, la Dra. Sandra Aurora González Sánchez de la UNICACH y el Dr. Joel Moreira Acosta de Energías Renovables.
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